¿Qué se puede hacer con un amor prohibido?
Por Ana Karina Lorenzo
Amores prohibidos, amores que matan, amores platónicos, en fin, un amor imposible que pese a nuestros esfuerzos por olvidar sigue ahí, latiendo en nuestro pecho sin poder ordenarle a nuestro corazón y a nuestra mente que simplemente lo borre para siempre.
No te sientas culpable si te encuentras en una situación como esta aún teniendo una pareja estable o hasta un feliz matrimonio. Cómo diría Al Pacino en El Abogado del Diablo: "Mira, pero no toques; toca pero no pruebes; prueba, pero no tragues", en otras palabras, mientras solo fantasees en tu mente con esa persona, todo estará bien.
“Los amores prohibidos pueden ser como un rayo, que parte nuestra existencia en dos; un antes y un después. Pero si somos pacientes y tenaces, podemos atravesar esa fractura, igual que sana un hueso. Tal vez tome más tiempo”, escribió Juan Tonelli para la página web Infobae.
Ahora bien, ¿qué hacer cuando esto ocurre? Una interrogante que puede ser resuelta desde mi punto de vista con dos grandes soluciones:
Primera solución
De acuerdo a lo consultado por psicólogos expertos en temas de pareja, el primer paso es descifrar si realmente es imposible, bien sea por el estatus sentimental de ambos o la distancia. Luego debes enumerar aquellas cosas que debes cambiar para que ese amor se vuelva posible.
Segunda solución
En este punto deberás aclarar contigo mismo tus verdaderos sentimientos hacia esa persona, si es realmente amor, pasión o capricho. ¿Vale la pena dejarlo todo?
Si finalmente te diste cuenta que es solo una obsesión, lo mejor que podrás hacer es continuar con tu día a día y salir de la rutina con tu pareja estable (si, la real), dedíquense tiempo para revivir la llama de la pasión, como en los viejos tiempos. A veces la monotonía y falta de atención hace que nuestros ojitos y mente se distraigan de aquello que es realmente importante.
Finalmente, si permaneces a ese grupo que cree poder amar a dos personas a la vez, déjame decirte que eso sí que no está bien, no se puede jugar con el sentimiento de dos personas. De manera que lo mejor que puedes hacer es acudir con un especialista (psicólogo) para que te ayude a aclarar tus sentimientos y emociones.